Reforzamiento en caso de fallecimiento por Covid-19
Otra de las medidas adoptadas frente a la actual crisis sanitaria, es capacitar a los funcionarios que se desempeñan en unidades clínicas sobre el correcto procedimiento en caso de que un paciente fallezca producto de Covid-19.
El protocolo establece que al fallecer un paciente diagnosticado con Coronavirus se debe permitir el acceso [a la sala o zona de aislamiento] de los familiares para una despedida, señalándoles claramente que no deberán establecer contacto físico con el cadáver ni con las superficies u otros enseres de su entorno o cualquier otro material que pudiera estar contaminado. Para esto, se debe ingresar a la sala con los adecuados elementos de protección personal.
El objetivo de capacitar al personal, como explica Evelyn Villanueva, enfermera Encarga I.A.A.S del instituto Traumatológico es, “que los funcionarios conozcan, y de ser necesario apliquen correctamente el protocolo de manejo de pacientes fallecidos por covid-19 específicamente el proceder y el kit preparado para la situación, y así evitar cualquier riesgo de contaminación”.
Es importante señalar que ni los familiares ni las empresas funerarias podrán realizar tareas como lavar y vestir a la persona fallecida. Tras la despedida, el cuerpo debe introducirse en una bolsa impermeable que se pulverizará con desinfectante de uso hospitalario, para ser trasladado a la brevedad posible a la morgue o sala mortuoria del recinto.
Reforzamiento en caso de fallecimiento por Covid-19. Noticia ingresada con fecha 30 de Abril del 2020.
Otra de las medidas adoptadas frente a la actual crisis sanitaria, es capacitar a los funcionarios que se desempeñan en unidades clínicas sobre el correcto procedimiento en caso de que un paciente fallezca producto de Covid-19.
El protocolo establece que al fallecer un paciente diagnosticado con Coronavirus se debe permitir el acceso [a la sala o zona de aislamiento] de los familiares para una despedida, señalándoles claramente que no deberán establecer contacto físico con el cadáver ni con las superficies u otros enseres de su entorno o cualquier otro material que pudiera estar contaminado. Para esto, se debe ingresar a la sala con los adecuados elementos de protección personal.
El objetivo de capacitar al personal, como explica Evelyn Villanueva, enfermera Encarga I.A.A.S del instituto Traumatológico es, “que los funcionarios conozcan, y de ser necesario apliquen correctamente el protocolo de manejo de pacientes fallecidos por covid-19 específicamente el proceder y el kit preparado para la situación, y así evitar cualquier riesgo de contaminación”.
Es importante señalar que ni los familiares ni las empresas funerarias podrán realizar tareas como lavar y vestir a la persona fallecida. Tras la despedida, el cuerpo debe introducirse en una bolsa impermeable que se pulverizará con desinfectante de uso hospitalario, para ser trasladado a la brevedad posible a la morgue o sala mortuoria del recinto.
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